Espacio de Coworking en Baró de Viver

Ante la necesidad de crecer y ofrecer nuevos espacios para reuniones, se diseña un nuevo espacio para el coworking de retorno social Sinérgics, situado en Baró de Viver, Barcelona.

El nuevo espacio debía funcionar como un espacio polivalente tanto para cursos o presentaciones como para reuniones o videollamadas. El nuevo espacio dispone de cortinas de suelo a techo que permiten a los usuarios dividir la sala en dos espacios independientes que se pueden utilizar simultáneamente, habilitando a dos usuarios en un mismo espacio con privacidad y sin interferencias.

Cuando se pliegan las cortinas, se crea un único espacio abierto para alojar a grupos más grandes o diferentes actividades. El diseño se mantiene lo más simple posible: el espacio queda delimitado por paredes blancas y grandes ventanas de suelo a techo abren la sala en la calle adyacente. Las vistas desde esta calle también pueden bloquearse con cortinas para garantizar la privacidad cuando sea necesario. El suelo se mantiene continuo y homogéneo, dando la idea de un único espacio diáfano, en contraste con el techo, que potencia la fragmentación de la estancia en zonas más pequeñas utilizando distintos colores para cada subsala que se perciben como bloques físicamente separados, aprovechando los espacios intersticiales para esconder los riles de las cortinas.

Los colores se eligen para dar una apariencia claramente diferenciada en cada subdivisión, lo que permite una transformación total del espacio cuando se corren las cortinas, haciendo aparecer y desaparecer los bloques de color según la disposición de las particiones. Los tres colores escogidos aportan al espacio una atmósfera que recuerda a edificios e infografías de la Bauhaus, apelando al entorno de trabajo compartido ya los ideales de la comunidad, que son imprescindibles para Sinérgics.